¿Cómo se trabaja en el centro de psicología y bienestar emocional?
La intervención está basada en un enfoque cognitivo conductual. Este enfoque tiene una eficacia acreditada por un gran número de estudios.
¿Qué significa un enfoque cognitivo conductual?
Este enfoque parte de la idea que el comportamiento humano se divide en tres partes: Lo que pensamos, lo que sentimos y lo que hacemos. Desde esta perspectiva, las cogniciones (lo que pensamos), las emociones (lo que sentimos) y las conductas (lo que hacemos) están totalmente relacionadas. Así, cada persona actúa de una manera distinta ante una misma situación. Por lo tanto, lo que cambia es la interpretación que cada uno hacemos de esa situación.
De aquí que una parte muy importante de la intervención vaya encaminada a “lo que pensamos” y adquirir habilidades de afrontamiento nuevas y alternativas a las que ya teníamos.
¿Cómo se lleva a cabo?
Hay 3 fases en todo este proceso
- Evaluación
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Las primeras sesiones se dedican a evaluar cuál es el problema, qué factores están influyendo, cómo está afectando, como afecta al entorno y puede ser que se pida rellenar unos cuestionarios para completar la información. En esta fase se crean unos objetivos para ir trabajando el resto de sesiones, una vez completada esta fase que puede durar 2 ó 3 sesiones, pasamos a la siguiente.
- Intervención
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En esta fase se irán aprendiendo diferentes técnicas para ir modificando aquellos pensamientos que son erróneos y nos hacen daño, aquellas situaciones que nos están perjudicando. La duración de esta fase es variable, depende del problema y de las circunstancias. Una vez que hemos cumplido los objetivos que nos propusimos al principio pasamos a la siguiente fase
- Seguimiento
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Es muy importante consolidar aquello que hemos trabajado, con sesiones más distanciadas en el tiempo, evitaremos tener una recaída y afianzaremos aquello que hemos aprendido. Una vez consolidado y cumplidos los objetivos que nos hemos marcado al principio, se finaliza el tratamiento.
En el caso de los niños, las fases son las mismas y es imprescindible la colaboración de la familia, pues muchos aspectos se van a trabajar a través de los padres.<
¿Cómo te puede ayudar?
La terapia cognitivo conductual tiene unas características muy concretas:
- Tiene un número concreto de sesiones, que son variables en función del problema a trabajar. Las sesiones son semanales y a medida que se van cumpliendo los objetivos se van distanciando en el tiempo.
- Cada sesión dura entre 45 y 60 minutos
- Trabaja desde el momento presente, aunque tiene en cuenta la trayectoria vital.
- Se marcan “tareas para casa” que consisten en ir aplicando las habilidades que se van aprendiendo para ir cambiando poco a poco, de manera que se van consiguiendo los objetivos que nos hemos propuesto al inicio.
- La terapia es efectiva en a medida que ayuda a mejorar tu calidad de vida